Los avances logrados en el área de telecomunicaciones han permitido que el hombre se desempeñe de una manera más eficiente, y es esta eficiencia lo que en gran medida, ha motivado a empresas nuevas que día a día exigen mayores retos a quienes lo desarrollan.
De esta forma, se ha llegado a alternativas de gran impacto a través del tiempo como son: Internet (correo electrónico), tren rápido, avión, cables de comunicación (ejemplo: fibra óptica), telefonía celular, televisión por cable, etc.
Al comenzar el tercer milenio, la
humanidad está creando una red global de transmisión instantánea de
información, de ideas y de juicios de valor en la ciencia, el comercio,
la educación, el entretenimiento, la política, el arte, la religión, y
en todos los demás campos. En esta red ya se puede ver en tiempo real,
el sentir de la humanidad, pero al mismo tiempo también es posible
tergiversar, manipular o frivolizar este sentir; es decir,
paradójicamente, los medios de comunicación también pueden usarse para
separar y aislar.
A lo largo del desarrollo de la vida del hombre, los medios de
comunicación han constituido un papel importante dentro de éste. Estos
han contribuido, desde un principio, a acercar más a la gente, en el
sentido que se ha ido facilitando, cada vez más, la comunicación y la
información. Lo anterior se puede ver reflejado desde el invento de la
radio, teléfono, televisión, fax, teléfonos celulares, satélites,
Internet, entre otros. Estos medios de comunicación al situarlos en una
línea de tiempo, muestran una gran evolución tecnológica que ha
permitido superar fronteras.
En este sentido se hace necesario acudir a Habermas, para aclarar que definitivamente el problema de la modernidad no ha podido ser resuelto ya que ha sido abordado desde la razón técnica, es decir, que el hombre ha privilegiado la articulación de medios a fines para controlar el medio externo, teniendo esto como resultado el desarrollo de la técnica, a diferencia de lo que pasaría si se abordara el problema de la modernidad desde la razón práctica, la que tendría como resultado la comprensión de los sujetos, que es justamente lo que consideramos que falta en este momento de la historia de la humanidad.